Normalmente los primeros dientes de leche del bebé salen entre los seis y los nueve meses. La dentición infantil dura aproximadamente 2 años.
Los síntomas y señales que acompañan a la salida de los primeros dientes son: salivación intensa, irritabilidad o inquietud, inflamación y dolor en las encías. También puede ocurrir que tengan ganas de morder o masticar, problemas para dormir y rechazo de la comida.
No todos los bebés son iguales, y puede que en alguna ocasión la salida de los dientes de leche se adelante o se retrase. No hay por qué preocuparse por ello ya que influyen factores hereditarios y por la constitución biológica del bebé.
Eso si, si pasados los 18 meses aún no presenta ningún diente de leche, es recomendable acudir a dentista para niños u odontopediatra.